El Campo de Gibraltar es una comarca de gran valor desde el punto de vista botánico. Su peculiar orografía y su situación privilegiada entre dos mundos son las causas principales de la existencia incluso de endemismos. Con respecto a la fauna, hay que destacar que todo este espacio se halla situado dentro de las rutas migratorias de numerosas especies de aves, que utilizan toda la zona del Estrecho como principal paso migratorio de Europa Occidental.
Desde el punto de vista climatológico, el Campo de Gibraltar, como toda la zona del Estrecho, es uno de los espacios de la península con menores oscilaciones térmicas a lo largo del año, con inviernos y veranos muy suaves, aunque con un acusado protagonismo del viento.
Nos encontramos en una zona que ha sufrido desde la toma de Gibraltar en 1704 una radical transformación, ya que su paisaje ha cambiado sensiblemente desde entonces. Tendríamos que revelarlo a través del ejercicio de una auténtica Arqueología del Paisaje, que es la que busca reconstruir el medio natural del pasado para entender los pueblos antiguos que lo habitaron y su relación con el propio entorno.