En una tarde marcada por el buen tiempo, la Real Hermandad del Santo Entierro de Cristo y Nuestra Señora de la Soledad pudo realizar su esperada estación de penitencia desde su casa hermandad, ubicada en la calle Empedrada del barrio San Francisco. Este año, a diferencia de ocasiones anteriores marcadas por la incertidumbre meteorológica, el cielo despejado permitió que los titulares recorrieran las calles del municipio ante una multitud de fieles y vecinos que los acompañaron durante todo el itinerario.
La procesión, que comenzó a las 19:00 horas, contó con la participación de dos tronos: el del Cristo Yacente y el de Nuestra Señora de la Soledad.
La música estuvo a cargo de la Agrupación Musical «Nuestro Padre Jesús Cautivo» de Dos Hermanas, que acompañó al Cristo Yacente, y la Banda de Música La Gastoreña de El Gastor (Cádiz), que lo hizo con la Virgen de la Soledad, aportando solemnidad y emoción al cortejo.
El itinerario incluyó puntos tradicionales como la calle Alameda, Puente Nuevo, Plaza de España y la Carrera Oficial, donde el paso por el palco de toma de horas tuvo lugar a las 21:45 h, finalizando la estación de penitencia alrededor de las 00:30 h con el regreso a su templo.
La jornada del Viernes Santo dejó momentos de recogimiento, fe y belleza que permanecerán en la memoria de los asistentes.