Ayer Martes Santo, la Parroquia de Padre Jesús acogió el Solemne Vía Crucis Penitencial del Arciprestazgo de Ronda y su Serranía, que este año se celebró de forma estática, sin recorrer las calles, en un ambiente de profundo recogimiento, contemplación y oración.
El sacerdote Paco Sánchez fue el encargado de guiar este acto de fe, enmarcado dentro del itinerario espiritual propuesto por el Papa Francisco con vistas al Jubileo del 2025, bajo el lema “Peregrinos de la esperanza”. En su mensaje, recordó que Cristo está presente en nuestras vidas y nuestra historia, y que la esperanza transforma cada paso del camino.
“Este Vía Crucis ha sido un momento íntimo. Lo hemos vivido sentados, en contemplación, en silencio y en veneración”, explicó el Sánchez, quien también invitó a quienes lo desearan a acercarse a sostener la cruz durante algunas estaciones.
Durante la celebración se subrayó que el sufrimiento no tiene la última palabra, y que, como Jesús cargó con la cruz, los fieles también están llamados a caminar con esperanza hacia la puerta santa, símbolo del encuentro con Dios en este tiempo jubilar.
La comunidad respondió con devoción, participando activamente en esta experiencia de fe que recordó que, en palabras del propio sacerdote,
“La única esperanza eterna está en la persona de Jesús, porque solo en Él descubrimos que hay eternidad”.
